¿Que
es la llamada “Anomalía del Mar Báltico”?
El
pasado verano el descubridor/aventurero Peter Lindberg estaba
buscando un carguero hundido en el fondo de golfo de Botnia, en el Mar Báltico, cuando la pantalla de su sonar le mostró
una imagen inusual, la de un “objeto” circular de unos 60 metros
de diámetro, o lo que seria lo mismo, el diámetro equivaldría a la
altura de un edificio de unos 30 pisos de altura. Otra cosa curiosa
que mostraba el sonar era una hendidura en línea recta en el fondo
marino de unos 100 metros, como si el “objeto” se hubiera
arrastrado por el fondo antes de detenerse.
Una
de las cosas que hace que este “descubrimiento” sea tan
atractivo es que tan solo se encuentra a menos de un centenar de
metros de profundidad, lo cual hace que sea fácilmente accesible,
razón por la cual Lindberg ha mantenido las coordenadas en secreto
desde que lo localizó, a pesar de que según él, pese a no haber
hecho pública la localización a las pocas horas de haber visto la
imagen en su pantalla de sonar y haberlo hecho público la zona se
llenó de navios de guerra navegando en círculos, como intentando
localizar su “hallazgo”.
Hasta
aquí un breve resumen de lo que sabemos hasta ahora.
Las
explicaciones dadas
Sobre
que es la “anomalia” se han dado durante estos meses diferentes
explicaciones. Vamos a repasar algunas de ellas:
Navío
Ruso: Se ha dicho entre otras cosas que podria corresponder a un
navío ruso, la mas extendida hace referencia a un navío de forma
circular (se construyeron según informaciones oficiales el San
Petersburgo, el Kronstadt y el Asamblea de Nikolayev,) con casco de
acero construido en la segunda mitad del siglo XIX. El diámetro del
buque era de 29,2 metros (unos 40 metros menos que el diámetro
mostrado por el sonar). Hablamos de barcos de casco de acero, pero
por lo demas impulsados por potentes motores de vapor.
Si
nos vamos a la contemporaneidad, estaríamos hablando de un navío
similar al Catamarán PlanetSolar "Turanor" había
construido por el astillero Knierim Yachtbau Alemania Kiel por 17,5
millones de dólares. La eslora del buque es de 30 metros, anchura de
15 metros (obsérvese que en este caso ni la eslora ni la anchura
coinciden con las medidas de la imagen sonar). En el piso superior
catamarán es 38000 celdas fotovoltaicas. Lo mas increíble de esta
explicación es que un navío tan moderno no contase con GPS para que
la marina rusa pudiera localizarlo para recuperarlo o destruirlo para
que no cayera en malas manos, pues no debemos olvidar que la
“anomalía” se encuentra en aguas internacionales, y por tanto
quien lo encuentre será el dueño legítimo del hallazgo.
Roca
o meteorito: También se ha hablado de que pudiera tratarse de
una caprichosa formación rocosa o bien de un meteorito. El primer
caso no es en absoluto descartable, en el segundo caso parece muy
dudoso que un meteorito de ese tamaño (cabria pensar que
inicialmente, antes del impacto, debería ser aún mas grande) dejase
a penas unas marcas de arrastre de 100 metros, teniendo en cuenta la
velocidad previsible de caida y la poca profundidad de las aguas.
Bolsa
de gas o similar: Otra de las explicaciones expuestas hacen
referencia a una bolsa de gas u otro fenómeno natural que ha creado
esa deformación en el terreno, cosa que tampoco parece muy
plausible.
UFO
crash: Naturalmente la explicación más excitante es la de una
nave de origen extraterrestre que se hubiera podido estrellar en
aquella zona. Esto se debe entre otras cosas a la “similitud” de
la imagen del sonar con la famosa nave de la Guerra de las Galaxias
de nombre “El halcón milenario”. No me siento capaz de decir si
esta posibilidad es o no creíble, pues la cuestión OVNI sigue
siendo para mi una cuestión abierta a múltiples interpretaciones y
posibilidades que nadie ha podido desvelar o explicar de forma
incontrovertible.
Como
puede verse en las imágenes el símil comentado puede despertar la
imaginación de cualquiera, incluso la de un especialista en la
creación de imágenes digitales que basándose en la imagen de la
pantalla del sonar ha recreado la “anomalía” con un realismo que
deja poco lugar a la interpretación.
La
nueva expedición
El
pasado sábado Peter Lindberg
partió en una nueva expedición hacia un lugar indeterminado en
aguas internacionales en el golfo
de Botnia, en el Mar Báltico,
lugar en el que se encuentra la ya famosa “anomalía”. Durante
los meses que han transcurrido desde el “hallazgo” Lindberg ha
estado encontrando financiación para bajar al fondo del Mar Báltico
y ver y filmar que hay allí. Ahora “armado” de un equipo
especializado en la grabación de documentales y un sumergible,
además de una reducida tripulación pretende desvelarnos a todos el
misterio.
En
el momento de escribir estas líneas, tres días después de su
partida, Lindberg no ha dado señales de vida, lo cual está
impacientando a sus seguidores y a miles de curiosos. ¿Llegará al
lugar?, ¿se lo permitirán?, l¿a “anomalía” seguirá allí?,
¿con que se encontrará a 100 metros bajo el mar?.
La
expedición tiene prevista una duración de aproximadamente 10 días,
no hace falta especular más sobre que hay “allí”, solo hemos de
tener algo de paciencia, que la paciencia es la madre de la ciencia.
Xavier Soler
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